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DECLARACION DEL V ENCUENTRO GUEVARISTA SOBRE PROCESO POLITICO URUGUAYO

A siete años de la experiencia progresista en el Uruguay, no se precisa recurrir a opiniones de la
izquierda revolucionaria o el sindicalismo clasista, para definir el modelo económico, sino apelar
a las opiniones de los propios progresistas. “El gobierno del FA no tuvo cambios mayores de la
política económica de los gobiernos anteriores.”

Un modelo capitalista dependiente, neoliberal y fondomonetarista. Un modelo basado en
la inversión extranjera que profundiza el capitalismo, la dependencia y la vulnerabilidad
ante presiones de cualquier naturaleza del capital financiero internacional. El actual modelo
basado en la exportación de productos primarios, hegemonía del capital financiero, creciente
endeudamiento externo, privatizaciones del patrimonio nacional y estatal, entrega de las tierras a
los monopolios sojeros, madereros y mineros, apertura comercial indiscriminada, zonas francas,
exoneraciones tributarias a la inversión extranjera, amnistías fiscales a los agro negocios.

Esta política económica tiene su contracara de una super-explotación de la clase trabajadora,
donde el 80% de los trabajadores no superan los 12 mil pesos de promedio, donde una
cuarta parte de la canasta familiar llega a los 45 mil pesos.El salario mínimo decretado por el
progresismo de 7.200 pesos (360 dólares) son los ingresos de 400 mil trabajadores.Las jubilaciones
de los trabajadores del ayer apenas promedian 9 mil pesos (450 dólares), y sobre una PEA de
1millón y medio de trabajadores, hay 100 mil desocupados, 400 mil trabajadores en negro. El
45% de los niños vive en hogares pobres, hay un núcleo duro de pobreza que llega a las 450 mil
personas y aumentaron los asentamientos precarios, 36 de cada 100 jóvenes no completan su
ciclo básico, 5.500 familias viven del clasificado de la basura, si bien algunos indicadores sociales
mejoraron, por el período de crecimiento sostenido, sin cambiar sustancialmente las condiciones
de explotación y miseria de las mayorías.

El progresismo no solamente ha entregado la soberanía y el patrimonio nacional, sino que se
ha alineado con el imperialismo, haciéndose cómplice en el intervencionismo de Haití y Congo.
Se ha callado ante el genocidio del pueblo palestino y las invasiones criminales imperialistasa los
pueblos de Irak, Afganistán, Libia, Somalía, etc.

En definitiva estos hechos económicos, sociales y políticos prueban, sin ninguna duda, que el
progresismo es funcional al imperialismo y la oligarquía y que, a través del pacto de unidad
nacional con los partidos políticos tradicionales de la burguesía, ha traicionado el programa
histórico y las necesidades mas urgentes de los explotados.

Ante esta situación, común a toda Latinoamérica, al pueblo uruguayo, al igual que a todos los
pueblos sometidos al imperialismo, se les plantea una única alternativa, la lucha por la liberación
nacional, indisolublemente ligada a la lucha por el socialismo.

SOLIDARIDA CON EL PUEBLO DE HATI

Hati fue el primer pueblo de America que logro su independencia del colonialismo Francés.

Hoy se encuentra ocupada por tropas del minustah, formada por Chile, Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay, etc, haciendo de sub-contratista del imperialismo norteamericano, el relevo de las tropas norteamericanas tras las catástrofes naturales que ocurrieron tiempo atrás consolido la ocupación  Haiti debate hoy en dia su existencia como nación, este pequeño territorio americano tiene bajo su suelo grandes reservas de petróleo y gas.

También empresas  multi-nacionales de primeras marcas mundiales( Nike, Adidas, Levis, etc) reduce a trabajo esclavo a la población a gran parte de la misma, pagando salarios miserables, la pobreza exptrema y la ambruna llevan al pueblo a alimentarse con un pan elaborado de tierra mesclada con margarina.

La intención de los gobiernos progresistas, enmarcados en el U.N.A.S.U.R, juegan un papel de gendarmes respecto a la O.T.A.N.

Los gobiernos progresistas de Latino-America festejan sus fechas patrias de independencias, cuando por otro lado envían tropas a OCUPAR nuestro pueblo hermano de Haiti

Exijimos el RETIRO inmediato de las tropas de minustah junto con las tropas Norte-Americanassomo solidarios de las luchas, hacia el camino de su LIBERACION como pueblo.

FURA DE HAITI TROPAS DE OCUPACION  DE LA O.T.A.N Y U.N.A.S.U.R

 

DECLARACIÓN SOBRE LA SITUACIÓN ARGENTINA.

 

 

 

Producto de una de la mas profunda crisis de nuestro país, situación que genero una de las mayores situaciones de desocupación y pobreza, que tuvo como pico máximo en la lucha del pueblo las heroicas jornadas del 19 y 20 de diciembre, tuvo como consecuencia el fin de un modelo que significo la salida de la convertibilidad y el paso a la devaluación.

 

En ese marco y producto del viento de cola de la situación económica internacional, se reactivo la economía con un crecimiento a un promedio del 7% anual, situación que implico la generación de empleo, el mejoramiento parcial de las condiciones de vida y una política de asistencialismo por medio de insuficientes planes sociales. Pero lo que no hubo fue redistribución de la riqueza ya que los distintos sectores de la burguesía imperialista obtuvieron ganancias extraordinarias como pocas veces en la historia.

 

Por otro lado, no se soluciono ninguno de los problemas estructurales. Es decir, el 40% de la clase trabajadora esta en negro, existe un alto porcentaje de desocupación, el 70% de los jubilados cobra un cuarto de la canasta básica familiar, existe un déficit habitacional de 3,5 millones de viviendas, se deterioro considerablemente la educación y salud pública, y casi un 25% de la población vive por debajo de la línea de pobreza. Por eso, a lo largo de estos 8 años, el pueblo trabajador dio innumerables luchas en los distintos sectores: por condiciones laborales y salario, educación, salud cultura, vivienda, dando sobradas muestras de que la rica historia de lucha por la dignidad de nuestro pueblo, sigue intacta.

 

En ese marco, el fin de las condiciones internacionales que dieron aire y posibilitaron el populismo kirchnerista, traen aparejada la caída de la máscara progresista del gobierno nacional. Desde su discurso de asunción, Cristina Fernández se posiciono abiertamente (más que antes), contra todo reclamo salarial y lucha que ponga en cuestión las cuantiosas ganancias capitalistas. El intento de imponer un techo salarial, las medidas ajuste y aumentos en los servicios públicos más elementales y los despidos que se acrecentarán con la profundización de la crisis, dejan claro, si es que todavía alguien no lo vio, cuales son los intereses que defiende el actual gobierno. La sintonía fina es ajuste, represión y deterioro en las condiciones de vida para el pueblo. La protesta contra el saqueo y la depredación de las multinacionales en gran parte de nuestro país y los reclamos salariales que vienen, desde antes de la reelección presidencial, dejaron en claro que nuestro pueblo no se dejará expoliar mansamente y que los triunfos electorales no son cheques en blanco para el ajuste. Y como el gobierno sabe muy bien de esta disposición de lucha, es que la tropa propia de legisladores, incluidos aquellos reformistas “que están a la izquierda del kirchnerismo”, sancionaron la Ley antiterrorista con el objetivo de generar las estructuras legales para intentar contener las luchas del pueblo trabajador por medio de la criminalización de la protesta.

 

Esta nueva etapa, que traerá una creciente resistencia popular, nos encuentra a los luchadores y militantes revolucionarios, con la rica experiencia de las luchas sociales que llevaron a la rebelión del 2001, pero con un importante grado de dispersión en los espacios reivindicativos y fundamentalmente sin un espacio político común de los grupos y organizaciones con intenciones revolucionarias.

 

Esa experiencia de lucha y las perspectivas de mayor sufrimiento para nuestro pueblo, si no superamos la actual dispersión, nos llaman a poner en la agenda política el problema de la unidad, amplia y flexible en la lucha reivindicativa y táctica, pero fundamentalmente a dar los pasos necesarios para la unidad estratégica, entre las organizaciones que abrevamos en el marxismo y sostenemos consecuentemente la independencia de clase.

Forjar espacios de coordinación, de unidad de acción e intervención política común son las tareas que nos impone la hora.

 

Ese es el llamamiento que hacemos desde la CGI y el V° encuentro guevarista y el compromiso que asumimos para continuar en la lucha por la unidad y la revolución socialista.